Apetito 89.

 Crisis es oportunidad. Hablando de procesos culturales, y de obras sin historiografía, está el caso de los artistas que pintan con el pié y con la boca, es bien notable porque todos tenemos derecho a expresarnos, el arte no tiene edad, ni género, ni clase social, es una necesidad vital que otros convierten en competitivo. Con respecto a la edad, siempre creí que a mi edad podía empezar, hay cosas que no se pueden hacer sino jóven, como montarse a un trapecio, pero en artes uno debería tener la posibilidad de empezar a exponer a los 54 años. De hecho, mirando lo de mi pensión de invalidez, soy maniaco depresiva, encuentro que hay pocas ofertas formativas, yo quiero eventualmente volver a la universidad, terminar los estudios que empecé, o hacer una maestría o un doctorado. Y con respecto a la discapacidad, yo siempre recuerdo el caso de mi ex marido, el papá de la niña, Andrés Villa Pareja, que fué productor de televisión, hizo radio y escribió para un periódico local, realmente no hay límites, cuando uno quiere conseguir algo, se puede. Otra mirada a crisis como oportunidad es el de la UDCA, Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales, ellos tenían la necesidad de formar integralmente a sus estudiantes, y sin tener facultad de arte, asumen la producción de unos happenings, que deberían estar en la historia del arte, eran unas comparsas que recorrían todo el campus y al que los estudiantes se iban sumando. En mi caso, ante la imposibilidad de continuar en la televisión pasé a la web, y tuve la oportunidad de aprender sobre cultura digital, sobre producción de contenidos, sobre uso de tecnologías, manejo de software, es otra manera de mirar la comunicación y las artes. Ahora mismo sin mi taller, he estado haciendo pruebas con Inteligencia Artificial a ver qué más puedo conseguir en términos de imagen, Lo cierto es que quien no se adapta fenece, y a mí me ha tocado hacer muchas adaptaciones en la producción de arte. 

* Las comparsas forman parte de los primeros happenings que se dieron en el país, muchas de ellas ligadas a los actos circenses. En happening también, las puestas en escena en las que un músico acompaña a un pintor que va trabajando en su pintura al ritmo de la música. Y happening también, las acciones de pintar los cuerpos de los asistentes con vinilos y otras pinturas a modo de maquillaje artístico. Ésto se vió en Bogotá, Medellín y Cali.